La apariencia resulta ser un factor importante.
Para la mayoría de personas es muy importante, sobre todo a la hora de conseguir un trabajo o cuando buscan dar una buena impresión ante alguien más.
Por esa razón que para muchos, el estar delgados se vuelve un objetivo que alcanzar.
Es un error común asociar el estar delgado con estar sano, de hecho existen muchas enfermedades que las personas delgadas son propensas a padecer.
Esto quiere decir que estar delgado no excluye en lo absoluto el tener enfermedades.
Algunas personas son delgadas por naturaleza.
Son aquellas que tienen un metabolismo más rápido que el resto de las personas y por lo tanto los alimentos se digieren más rápidamente y no se acumulan como grasa corporal.
Aún así, esto no les da el derecho de comer comida chatarra, dulces en abundancia, comidas pre cocinadas u otras sin que les resulte dañino.
Las personas con dicho metabolismo tienden a no cuidar su alimentación.
No tienen en cuenta que ellos también pueden sufrir enfermedades o trastornos alimenticios, así como también pueden llegar a tener problemas de colesterol y azúcar por tal descuido.
Por otro lado, hay personas que tienen una obsesión severa con el verse delgados, y tienden a excluir alimentos que reducen sus calorías al máximo.
Dejan al cuerpo sin los nutrientes que este requiere para cumplir con sus funciones vitales.
Estar sano y delgado a la vez
Contar con una alimentación saludable y equilibrada es lo mejor que puedes hacer por ti para estar sano y a la vez tener un cuerpo esbelto.
Además de que sería perfecto si esta alimentación se encuentra acompañada con rutinas de ejercicios físicos.
Los beneficios de una buena alimentación se ven reflejados en el sistema inmune, en el buen funcionamiento de los órganos de nuestro cuerpo y en el metabolismo, ayudando así a prevenir miles de enfermedades.
Al ingerir alimentos que son bajos en nutrientes.
Ejemplos:
Productos altos en azucares.
Ingredientes artificiales.
Las grasas saturadas.
Las funciones vitales del cuerpo quedarán afectadas de forma negativa, y aunque el peso corporal se conserve igual, estos alimentos ponen en riesgo la salud.
Peso ideal
Para mantener un peso ideal, es recomendable llevar una dieta mediterránea.
Esta dieta incluye frutas y verduras, trigo, legumbres, frutos secos y grasas saludables, que pueden provenir del pescado y el aceite de oliva.
Esta dieta es bastante favorable para el corazón y para la salud en general.
Reduciendo los alimentos que son poco saludables de tu rutina alimenticia e incorporar alimentos ricos en nutrientes , puede generar cambios beneficiosos que en su debido tiempo se notarán.
Los alimentos nutritivos hidratan el cuerpo, eliminando toxinas y mejorando la piel.
Además de satisfacer el hambre, pierdes peso de manera natural y ayuda a subir las energías que necesitas para sentirte menos pesado y cansado.
Es importante tener en cuenta los riesgo que traería el solo pensar en “verse bien” y ser capaz de entender que estar delgado no es sinónimo de tener una buena salud.
Todo esto no quiere decir que tengas que dejar de permitirte algunos gustos comiendo unos cuantos dulces de vez en cuando, solo que no se debe exagerar al comerlos y hay que hacerlo con moderación.
Es bueno tener una linda apariencia, pero es de mayor importancia mantenerse siempre saludable.